La disposición sistemática de los distintos trabajos que componen la obra tiene una finalidad meramente ordenadora, pero no implica que el tratamiento de los temas se haga de manera uniforme, sino que se ha buscado deliberadamente que los trabajos representen la variedad de posiciones doctrinales y jurisprudenciales que, a pesar de los últimos esfuerzos realizados, especialmente en el ámbito jurisprudencial, siguen manifestándose en nuestra praxis. De ahí que aun coincidiendo algunos trabajos en su objeto de estudio se ha obtenido la pretendida diversidad de posturas al ser abordados desde planteamientos metodológicos y de política jurídica diferentes, lo que responde a la idea de ofrecer un libro útil a la tarea de legislar este tipo de contratos.
A partir de esta concepción el libro se estructura en tres partes. La Parte Primera, dividida en cuatro Secciones, está dedicada a la exposición de los principales problemas que en la praxis plantea la aplicación del régimen jurídico de los contratos de distribución.
La Sección II de la Parte Primera está dedicada a las cuestiones relacionadas con la Formación del Contrato, mientras que la Sección III de la Parte Primera se centra en el estudio del contenido del contrato de distribución.
La Parte Primera se cierra con la Sección IV dedicada al tema que sin lugar a dudas mayores controversias ha planteado en la práctica: la indemnización al distribuidor en el momento de extinción de contrato.
Un estudio sobre los contratos de distribución, aunque sea en una perspectiva de política jurídica, no puede orillar las implicaciones que esta figura jurídica tiene en el Derecho de la Competencia. De ahí que la Parte Segunda de este libro esté dedicada a las cuestiones de Derecho antitrust (Sección I) y de Derecho de la competencia desleal (Sección II).
El libro se cierra con una última Parte dedicada específicamente al sector de la automoción. La razón de sustantivar este concreto sector de la distribución no se debe sólo a su importancia económica, sino al hecho de que en él el dinamismo de las asociaciones empresariales a favor y en contra de la regulación de los contratos de distribución ha sido especialmente significativo.
